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La Asamblea Nacional (AN) aprobó, por unanimidad, el llamado «Acuerdo de rechazo a la provocación de Estados Unidos contra el pueblo y Gobierno de China», tras la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, a la región china de Taiwán.
«EE. UU. está jugando con candela, y promoviendo deliberadamente una guerra global», manifestó el diputado, Rodolfo Sanz, quien presentó el proyecto del Acuerdo.
Para Sanz, «nada justifica que EE. UU., en medio del conflicto ruso-ucraniano, despliegue la visita de una alta funcionaria en Taiwán con las consecuencias geopolíticas, geoestratégicas y militares que pueden desencadenar».
Asimismo, consideró que China ha hecho lo propio ante la provocación estadounidense y aseguró que tiene el legítimo derecho de hacerlo, según recoge la agencia de noticias China, Xinhua.
El diputado calificó la acción de EE. UU. como «una aventura peligrosa» y confió en la respuesta de la nación asiática.
«China tiene pleno derecho en su autodeterminación. China tiene pleno derecho de ejercer soberanía sobre su mar meridional, sobre el estrecho Taiwán», enfatizó.
El parlamentario aseguró que como defensores de la paz, están de acuerdo con la política de recuperación pacífica de China.
El proyecto de Acuerdo, compuesto por cinco puntos, respalda al pueblo y Gobierno chinos en la defensa de la soberanía.
En segundo lugar, rechaza las actuaciones de EE. UU. y en especial la visita de Pelosi, por constituir «una amenaza» a la paz y a las relaciones bilaterales.
Además, insta a denunciar la política injerencista del Gobierno estadounidense y ordena entregar una copia del documento a la Embajada de China en Venezuela.
Finalmente, instruye a publicar el acuerdo en la Gaceta Oficial de Venezuela.
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