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La expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, manifestó que si la Triple Alianza (Argentina, Brasil y Paraguay) del Mercado Común del Sur (Mercosur) aplica la cláusula democrática contra Venezuela para expulsarlo del bloque regional por supuestamente irrespetar los derechos humanos, también debería emplearse la misma contra Brasil, que no fue sancionado tras el golpe de Estado-parlamentario que la derrocó el pasado 31 de agosto.
Durante una rueda de prensa, Rousseff apuntó que “o tenemos una regla para todos o no. Es muy interesante esta historia de aplicar la cláusula solo a países que tienen determinadas características”, rechazó en base a las declaraciones de la Triple Alianza que indicaron que la República Bolivariana “no puede ser parte del Mercosur” porque “no se están respetando los derechos humanos”.
En ese sentido, Dilma aseguró que “tiene sentido (que Venezuela pertenezca al organismo regional) porque es un país de 45 millones de habitantes que, dentro de un proceso de integración, constituye un gran mercado”, afirmó.
Además, se mostró a favor del diálogo previo y el envío de “delegaciones oficiales” que busquen una “salida pacífica” para la situación política del país antes de aplicar sanciones.
Con el Mazo Dando