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Foto: @VTVeldesayuno
De la voz de uno de los soldados del 4 de febrero de 1992, Ronald Blanco La Cruz, la rebelión cívico-militar de ese día fue una jornada «en la que fuimos con el interés de que el pueblo viera otra forma de hacer política, para darle una esperanza, de ahí que ese pueblo ha llamado esta fecha como el Día de la Dignidad».
Este jueves se cumplen 24 años de la gesta cívico-militar, liderada por Hugo Chávez contra la aplicación de políticas neoliberales que favorecían a sectores oligárquicos y financieros y perjudicaban al pueblo, así como contra la decadencia del sistema político puntofijista, representado por el presidente de la época, Carlos Andrés Pérez.
Durante una entrevista este jueves en el programa El Desayuno, que transmite Venezolana de Televisión, Blanco La Cruz señaló que la premisa de esa lucha fue contra la corrupción y en defensa de la participación popular. Por eso la insurrección surgió desde las bases, «desde abajo, desde los soldados de origen humilde; no desde las cúpulas empresariales», y consideró que el Caracazo, ocurrido el 27 de febrero de 1989, cuando el pueblo se alzó contra el paquetazo neoliberal, constituye una raíz de lo que fue el 4F.
Relató que estuvo esta semana en la sede de la Universidad Militar, en Los Próceres, Caracas, donde brindó unas palabras alusivas al 4F y pudo palpar un profundo respeto y admiración que los jóvenes soldados sienten por el líder de la Revolución Bolivariana.
«Ahí está la siembra del Comandante, que va mucho más allá, en jóvenes que están en los cuarteles, en las universidades y a ellos les digo que con la fuerza del Comandante podremos hacer ese renacimiento de la revolución del que nos ha hablado el presidente (de la República) Nicolás Maduro, para que emerja ese nuevo liderazgo que se parezca a Chávez en el corazón, con su sentimiento, su acción y entrega, auténticos, sinceros».
De esta manera, el dirigente revolucionario llamó a continuar el rescate y el fortalecimiento del pensamiento bolivariano y retomar la bandera del 4F.
Hace 24 años, Hugo Chávez asumió públicamente su responsabilidad por la rebelión y se dirigió al país a través de los medios de comunicación y manifestó el célebre «por ahora», que significó para el pueblo la esperanza de un futuro de mayor justicia social, que se concretó con el triunfo presidencial del Comandante, en las elecciones de 1998.
Blanco La Cruz calificó ese «por ahora» como una palabra profética, «y que hoy debemos retomar con más fuerza. Estoy seguro de que es el mejor honor que le podemos brindar al Comandante».
AVN