Opinión

  • Chavistamente: Nadie es tan gafo

    Cuando aparecieron las fotos de Guaidog con los Rastrojos, dijeron que él no podía saber que esos eran Rastrojos narcoparamilitares. Que cómo iba a imaginarse ese muchacho que caminaba por una trocha entre Colombia y Venezuela, distraído, pensando en una pacífica invasión a su propio país, que esos señores que le pidieron una foto podían ser unos paracos.

  • Explicando la derrota del fascismo en San Juan

    Una vez más la línea editorial de la prensa contrarrevolucionaria mostró lo peor de su rostro “informativo” el pasado sábado, al reseñar de forma tendenciosa y manipulada hechos que se suscitaron a raíz de la llegada a la parroquia San Juan, Caracas, de personas identificadas con el golpista Juan Guaidó.

  • Guaidó y su “Modo Selfie”

    El descaro de la extrema derecha no tiene límites. Actúan con una desfachatez total, sin mesura alguna. Principalmente el rancio sifrinaje mantuano proveniente de las filas de Voluntad Popular y Primero Justicia. Son hordas de extrema derecha. No tienen vergüenza, moral o ética alguna. Su insensata obsesión por asaltar el poder político les ha llevado hasta los más fétidos y profundos albañales que se haya visto en la escena política venezolana.

  • Trama imperial

    La Constitución del 99 reconoce como fuente de protección de los derechos humanos los tratados internacionales suscritos y ratificados por la República en esta materia, y las leyes que los desarrollen, aplicados directa e inmediatamente por los tribunales y demás órganos del Estado.

  • El partido conferencia epíscopal contra el diálogo

    Que la alta jerarquía de la iglesia católica venezolana es un partido político de ultraderecha, es una verdad corroborada por nuestra historia. Desde siempre se alineó en las posiciones más conservadoras y retardatarias; fue así cuando fuimos una colonia de España y en la lucha por la Independencia, fue así durante la revolución popular y campesina que lideró Ezequiel Zamora y en cada uno de las etapas históricas en las que nuestro pueblo se rebeló contra la injusticia, la opresión y la explotación en los siglos XIX, XX y lo que va del siglo XXI. Hubo excepciones, si, muy puntuales y coyunturales, que no invalidan lo que afirmamos.

  • Acuerdo y paz

    Entre las tenebrosas sanciones criminales y el bloqueo económico- financiero, el acuerdo entre el Gobierno y la oposición fue un haz de luz y esperanza, a pesar del imperio. Las descalificaciones de la derecha y los analistas cogidos fuera de base no se hicieron esperar. Partidos en peligro de extinción se centraron el aspecto cuantitativo de los opositores firmantes, en una oposición cuajada de minorías.

  • El kiosco de Earle: Rastrojos humanitarios

    La canallada envuelta en la hipocresía de la “ayuda humanitaria”, cada día se devela más. El bloqueo criminal que golpea la alimentación y salud del pueblo, le dice al mundo que aquella maniobra de los puentes tenía un fin más sórdido.

  • ¿Otro golpe por el petróleo?

    Después de la publicación de los cuatro libros de Dan Kovalik [escritor estadounidense] desde 2017 (The Plot to Scapegoat Russia, The Plot to Attack Iran, The Plot to Control the World y ahora The Plot to Overthrow Venezuela), finalmente ahora estoy cumpliendo la promesa que le hiciera de escribir esta reseña en el momento de la publicación de su primer libro, hace ya dos años. Sin embargo, la reseña es acerca de este cuarto texto, publicado la semana pasada. Aunque podría decir “más vale tarde que nunca”, en este caso es realmente una ventaja, puesto que lo que está sucediendo en Venezuela en este momento es quizá el más importante problema internacional.

  • Acuerdos con la oposición sin especuladores atravesados

    Quienes el lunes firmaron el acuerdo de diálogo con el Gobierno revolucionario, no son ningunos caramelos. Cada uno de ellos, en su debida oportunidad –como lo demuestra la historia-, labró su cuota de responsabilidad contra el país. Unos como gobernantes y otros desde la oposición. Podría guardar reservas hacia Luis Romero –dada su condición de joven aún-, dentro de estas consideraciones.

  • El TIAR, la guerra de Guaidó

    La extrema derecha, con su acostumbrada irresponsabilidad, pretende banalizar y minimizar el grave precedente que se ha generado con la activación y aplicación, en contra de Venezuela, del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR). Dejando la puerta abierta al conjunto de deschavetados guerreristas que están más que deseosos de armar un ejército de aniquilación (“ayuda humanitaria” lo llaman) para bombardear e invadir a nuestro país.