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Desde hace varios meses, más de 20 paramilitares colombianos permanecían en el suroeste de Caracas, entrenando y ejecutando planes violentos, denunció este sábado el presidente de la República, Nicolás Maduro.
“Están declarando todos los detenidos, hay tres paramilitares colombianos, pero declaran que habían más de 20 allí desde hace meses, y de los caídos, hay 10 que no tienen huellas dactilares en Venezuela”, por tanto, se presume que son colombianos, agregó el Jefe de Estado durante el acto de transmisión de mando del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Ceofanb).
Indicó que siguen tras la búsqueda de los cabecillas y del grupo de paramilitares colombianos que andan huyendo, los cuales “más temprano que tarde” serán capturados por los órganos de inteligencia.
Minutos antes, el mandatario recalcó que Colombia se ha convertido en un país que además de exportar drogas, ha beneficiado a una mafia gobernante que exporta violencia y terrorismo, así como «una máquina de mercenarios», siendo la peor amenaza que tiene hoy la región.
Puso como ejemplo los constantes ataques y planes desestabilizadores contra Venezuela, y el más reciente asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, en el que están involucrados al menos 18 mercenarios colombianos.
Igualmente, el mandatario reconoció la labor de los organismos de seguridad que actuaron en el operativo Gran Cacique Indio Guaicaipuro, y ordenó que los territorios liberados sean “reconstruidos”.
De acuerdo con la vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, capturaron a tres paramilitares colombianos, y desmantelaron bandas delictivas que buscaban desestabilizar al país con el respaldado de Estados Unidos y Colombia. Refirió que estos delincuentes crearon zozobra y angustia en las comunidades de la Cota 905, El Paraíso, El Valle y El Cementerio.
AVN